Esta especie de hormiga es conocida porque tiene la capacidad de inyectar un potente ácido denominado fórmico que puede generar una enorme quemazón en la piel. Un dolor muy fuerte que seguramente te deje marcado de por vida. Estas hormigas viven exclusivamente en Australia y basan su supervivencia en una visión más aguda que la del resto de insectos de su especie.